martes, 27 de noviembre de 2012

Tradición Familiar


Fidel no lo llevaba en los genes, después de fracasar rotundamente como exterminador de roedores, se dedicó a encantar a su mascota, Max. Fidel, mientras tocaba, sólo pensaba en cuan desilusionado hubiese estado su tatara-tatara-abuelo, el flautista de Hamelin.

6 comentarios:

  1. Estamos buscando escritores a los que entrevistar en nuestro blog para una nueva sección que comenzará a partir del mes de septiembre, así saber sobre sus proyectos y sus cosas. Si quieres ser uno de esos escritores, pásate por el blog y déjame un comentario.

    http://tamaravillanueva.blogspot.com.es/

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  2. Gracias por venir a mi blog, ya estas añadido en la pestaña de seguidores, ahora bien... ¿te apuntas a la entrevista? Te la mandaría al correo.

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  3. jajaja, mejor encandilar al perro que a las ratas jejeje, yo al menos lo preferiría. Un besazo.

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  4. Vengo del blog de Tamara y cuando leí tu historia y la vi la imagen del perro me enamore de tu blog. Me encanto tu ingenio un beso y te me cuidas.

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  5. Hola Fabián... leí la entrevista que te hizo Tamara... y la verdad es que me gustó
    He visto que te has hecho seguidor de la Estación... gracias y aquí me tienes

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Mis monos voladores (sí, los mismos del Mago de OZ) chequearan el comentario, de parte mía y de mis monos editores te agradecemos tu participación. uuuaaaaaa!! (esos son mis monos).