martes, 27 de noviembre de 2012


Felix, un viejo labrador, día tras día cumplía con su rutina, a las 9.00 A.M ingresaba a la mar y luego de 2 horas nadando, hasta casi perderse, regresaba y merodeaba el resto de día por el sector. Un par de turistas habían observado el comportamiento del perro por un par de días, se acercaron a un pescador que encontraron cerca, reparando su red.

- ¿Ese perro es suyo? -preguntó uno de los turistas-.


- No -respondió el pescador- se llama Felix.

- ¿Sabe por qué le gusta tanto el agua? volvió a preguntar el mismo turista-.

- No le gusta -el pescador se detiene de su tarea y observa a Felix salir del agua-. Su dueño se ahogó el año pasado y la mar no devolvió el cuerpo, él espera encontrarlo.

1 comentario:

Mis monos voladores (sí, los mismos del Mago de OZ) chequearan el comentario, de parte mía y de mis monos editores te agradecemos tu participación. uuuaaaaaa!! (esos son mis monos).